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Siresa, en el valle de Echo |
Estas son tres obras recientes, bajo techo. Se trata de mantener abierta también la puerta de la acuarela menos rígida, la que intenta -al menos lo intentas- no sucumbir al dibujo. Así, resultan varias las vías de acuarela que están vivas: la figura -con mi propio debate incomprensible entre la construcción densa de la forma interior y la frescura del agua-, la investigación-divertimento de formas en Heléboro y finalmente esto, la acuarela donde tú más bien asistes a lo que hace el pincel delante de tus narices, a ver qué pasa.
Esto aun está encorsetado pero estoy en ello, ya se verá.
Las imágenes se basan en esos sitios del Pirineo de Huesca que nos encantan a muchos, ...más que verlos, patearlos...
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Puente de la Glera, Torla |
Este puente de Torla formaría una
serie con otros de Huesca que sí pinté en directo en verano.
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Ibón de Acherito |
Siempre me había imaginado que pintar los paisajes de montaña era difícil porque ¿cómo puede la acuarela competir con algo que de por sí ya es tan hermoso como estos lagos bajo un circo pirenaico? Sin embargo, ha habido cosas para disfrutar como ese violeta de las montañas de la derecha o ver aparecer una hierba creíble con el amarillo verde. (Lo que más vale olvidar es el actual papel gvarro cuya única ventaja es que es barato).